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El Ojo de la Sangre



¿Nunca antes has deseado algo con toda tu alma...Tanto que estarías dispuesto a hacer cualquier cosa por conseguirlo? Si es así, y quieres obtener lo que deseas a cualquier precio, te hablaré, oh aventurero, del Ojo de La Sangre.

Antes que nada debes saber que al ojo le gustan los juegos, por lo tanto, si decides seguir adelante con esto, espero que estés dispuesto a jugar. Primero que nada procura estar solo en casa, así nadie podrá interrumpir. Luego de este punto, no habrá vuelta atrás. Si decides no jugar, solo vete, cierra el navegador y olvida que alguna vez estuviste ante la presencia de El Ojo de la Sangre. Pero si decides jugar, no te preocupes, yo seré tu guía mientras no haya ni la más mínima señal de duda en tu espíritu.
Buena suerte...

Cuenta hasta diez mientras el ojo te observa. No importa que tan bien guardes tus secretos, mentiras y pecados. El ojo llegará hasta las profundidades más recónditas de tu alma y te encontrará y desnudará todo aquello que escondes. Si te encuentra indigno no te preocupes, el juego ha terminado antes de comenzar y eres libre de irte, o puedes quedarte de espectador. Pero no intentes jugar. Esa es una grave ofensa y recuerda que él conoce muchas maneras de torturar un alma y un cuerpo.
Pero, si el ojo te ha considerado digno, escucharás en los momentos siguientes un suave tintineo de campanas que parece sonar solo dentro de tu cabeza. El juego ha comenzado y él lleva la ventaja.
Rápido, ponte de pie, ya no hay vuelta atrás. Corre y apaga todas las luces que estén encendidas. Todas absolutamente todas, rómpelas si es necesario porque has llamado a las criaturas de la oscuridad para que te ayuden y no lo harán si hay alguna fuente de luz en tu hogar. Luego vuelve aquí.

Comenzarás a escuchar susurros que parecen seguirte a donde quiera que vayas. Las criaturas de las tinieblas han respondido a tu llamado de ayuda y te están juzgando. Si no te han aprobado, las luces volverán a tu hogar y las criaturas te llevarán a las profundidades del abismo, donde serás objeto de las más crueles torturas y perversiones que nunca han pasado por la mente de los humanos.
Pero si has pasado será mejor que continuemos, pues el ojo es impaciente y no le gusta que lo hagan esperar.

Corre rápidamente al baño de tu casa, y no prendas la luz, enciérrate y coloca dos velas cerca del espejo. No importa si no tenías velas, ya tendrás dos en tu bolsillo. Espera a escuchar una voz de niña, dulce e infantil que tararea una melodía que seguramente te será conocida de tu infancia. En los momentos siguientes escucharás como la niña comienza a gritar pidiéndote que toques el espejo. No lo hagas... Será violada, torturada, mutilada , descuartizada y asesinada. No importa lo que escuches en medio de esa oscuridad, no importa lo que ella diga. No le hagas caso a sus gritos de ayuda. Ella murió hace tiempo, y nada de lo que hagas puede ayudarla. Está condenada a vivir sus últimos momentos de vida por la eternidad y no debes intervenir a menos que quieras sufrir su destino en carne propia.

Todo permanecerá en silencio unos segundos hasta que las dos velas se encenderán de pronto. En el espejo podrás ver el rostro de la niña, sin labios ni ojos que te mira sonriendo y estira una mano hacia tí para hacerte lo mismo que le hicieron a ella.
No te preocupes, recuerda que las criaturas de la oscuridad están de tu parte y no permitirán que te toque.

El espíritu de la niña entonces se quitará un lazo rojo del cabello y lo dejará en tus manos deseándote buena suerte, ahora sabe que estás jugando al mismo juego que ella perdió hace ya muchos años y ha decidido ayudarte.Guárdalo en tu bolsillo.

Si haz llegado hasta aquí significa que tu espíritu es fuerte, sin embargo tu destino aún es nebuloso.
Ahora debes ir hacia la cocina, una vez allí toma un cuchillo, el más afilado que tengas. Esto último es lo más importante, debe estar lo más afilado posible.

Ahora si tienes alguna habitación en la que guarden cajas y cosas viejas, algo así como un depósito, dirígete a toda prisa hacia él.
La puerta estará cerrada y la manija de esta arderá al rojo.Golpea tres veces y cuando escuches un gruñido parecido al que hace alguien que habla con la boca llena, entra. La habitación estará en penumbras y vacía, a excepción de una mesa y una silla en frente de ti. Sobre la mesa habrá un elegante mantel blanco de seda y un plato de porcelana. Siéntate educadamente en la silla y espera a que tu acompañante, al que no puedes ver bien, termine de comer. El hedor a carne descompuesta que despide es nauseabundo pero debes evitar hacer una sola mueca de asco. Pero si no puedes contigo mismo y no logras evitarlo, él parará de comer y te mirará a los ojos, aunque no puedas verlo sabrás que lo está haciendo. En ese momento di "Lo siento, algo que comí me ha hecho mal"
Tu acompañante no mediará palabra y continuará con su comida.

Espera a que deje de comer y arroje su plato al suelo. Todo permanecerá en silencio por unos instantes y luego te pedirá algo para comer. No importa lo que te pida no se lo niegues pues, más que la carne de los humanos, le gustan sus gritos. "Dedo" será seguramente su primera palabra. No dudes y toma el cuchillo que tenías y cercena uno de tus dedos. No importa si gritas y te retuerces. Él disfruta el espectáculo.

Coloca el dedo en tu plato y pásaselo. Él se lo comerá y te devolverá el plato vacío para que lo llenes de nuevo con lo que te pida a continuación. Depende de la valentía que haya en tu corazón el número de partes que te pida pues solo disfruta masticando la carne de los débiles.

Lo último que dirá será "corazón". No te alteres y coloca en el plato el lazo manchado de sangre que te dio la niña y pásaselo de nuevo. Él devorará el lazo y se atragantará con él. Proferirá múltiples alaridos hasta caer muerto sobre la mesa. Ponte de pié, lo más difícil ya pasó. Acércate a él y busca en el plato que le pasaste con el lazo. Encontrarás dos esferas viscosas, son un par de ojos. No los mires y guárdalos en tu bolsillo mientras sales de la habitación.

Tendrás todos tus dedos de vuelta y el dolor habrá desaparecido.
Hasta este momento has demostrado ser un digno oponente para El Ojo de la Sangre y ahora enfrentarás la última prueba que decidirá tu destino. Debes regresar a tu habitación y sentarte frente al ordenador como si nada.

Ella está detrás de ti ahora, por favor no voltees. Ella antes solía ser una hermosa mujer, pero pagó con su belleza y su vida la traición hacia su marido. Éste le arrancó la nariz y los labios, le amputó los senos y abrió con un cuchillo su vientre en el que llevaba el fruto de la infidelidad. Respira tranquilo, ella no te hará daño por ahora.

Comenzará a sollozar por lo bajo lo injusta que fue la vida con ella y lo cruel que fue su muerte y que jamas podrá ver a su hijo al que aún lleva descomponiéndose en su útero destajado y cocido por gruesos hilos de entre los cuales mana sangre purulenta.

Levántate, no la mires directo a la cara ni al vientre y di con toda la firmeza que puedas "Un humilde regalo para una dama tan bella" y sin mirarlos entrégale los ojos que tienes en tu bolsillo.

Si ella ríe de manera diabólica con una voz gruesa y sobrenatural, no has sido lo suficientemente convincente y ella personalmente te quitará tus ojos, abrirá tu estómago y coserá en él a su niño putrefacto. Pero si ríe con macabra inocencia, tu regalo le ha gustado y ha decidido darte su bendición. Ella se colocará los ojos y por primera y última vez podrás verla como era antes, quizás la más bella mujer que verás en tu vida y sentirás el impulso de seguirla cuando se esté yendo. Pero recuerda su verdadera imagen y despídela cuando te dé un beso en la mejilla.

La habitación se oscurecerá totalmente y solo quedará un sangriento punto rojo en una de las paredes de la habitación en la que estás. Se respetuoso pues estás ante El Ojo de la Sangre. Está furioso porque lo haz vencido en su juego y no perderá oportunidad de hacer con tu cuerpo cosas inimaginables y hacerte experimentar niveles de dolor que no crees posibles. Pero al fin y al cabo haz ganado. Ahora puedes pedirle tres y solo tres deseos. Puedes pedirle lo que quieras excepto,obviamente, más deseos. Eso sería estúpido de tu parte después de todo lo que haz pasado. Puedes pedirle que mate a alguien a quien odias, riquezas, fortuna, poder, conocimiento. Cualquier cosa que pase por tu mente.

Una vez que hayas terminado aparecerá ante ti un vial de vidrio y una pequeña navaja. Sin pensarlo córtate un poco el brazo lo suficiente para llenar un poco el vial, no es necesario llenarlo del todo. Has alimentado al Ojo de la Sangre con la tuya propia y por esto, te dejará ir.

Cierra tus ojos, las luces que antes apagaste se encenderán y aparecerás en tu hogar. No olvides darle las gracias a las criaturas de las tinieblas que te han ayudado y despídelas con cortesía. Jamás las volverás a ver ni a ellas ni a las demás criaturas que viste hoy. Sin embargo conservarás por siempre la cicatriz del corte en tu brazo con el que llenaste el vial de sangre.

Recuerda que lo que has visto esta noche es un secreto del cual jamás debes hablar con nadie. No te preocupes, nadie te preguntará por las cosas que hayas obtenido mediante los deseos anteriores.
Considérate afortunado pues eres uno de los pocos que ha vencido al Ojo de la Sangre.

Esto es todo, ha llegado mi hora de irme... Gracias por jugar.

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