Miré aquella silueta a lo lejos y eso fue lo peor, quise correr porque en verdad me estaba dando miedo al no diferenciar lo que miraba, tal vez era la sombra nocturna de algún arbusto de los que había en el parque y que aquellas viejas luminarias no alcanzaban a iluminar por completo Me detuve un momento para pensar en lo que estaba pasando, la silueta no se movía; yo seguía inmóvil no había nadie ahí para que se me fuera el miedo un poco, parecía una escena de película de terror porque como si fuese hecho adrede estaba completamente solo, y no había algún otro camino para llegar a mi destino Años y años caminando por ese mismo lugar y la mayor parte de las veces era en ese mismo horario, y jamás me había encontrado con algo de esa magnitud, me estaban ganando los nervios, mis piernas no me respondían, mi voz se apagó porque por más que intenté gritar no pude, pasaban los segundos que de me hacían eternos, y aquella silueta seguía ahí Padre nuestro que estás en el cielo, en